No escuché completa la «conferencia de prensa» de Regina Torne porque me enferma que se le de espacio a la promoción de la impunidad (no así con la estupidez, esa entretiene y no indigna) pero algunas partes que logre captar fueron francamente un asco. Y, peor que un asesino solo el que además de matar no muestra remordimientos.
La señora comienza diciendo que se le respete (¿cómo lo que es?, ¿la madre de una asesina?) y continua diciendo que en su gran carrera no ha hecho escándalos. Señora, lamento ser yo quien se lo informe pero esto ES un escandalo, y me viene a la mente aquella ocasión que el TV Notas (O Teleguia o lo que sea) publicaba sus fotos lesbicas de su juventud en teatro.
En fin, que la señora dice que el abogado busca fama no le da linea, pero minutos después le pregunta: «¿Puedo decir…?».
Después la maravilla de las contradicciones, que si su hija no tomaba ni fumaba, era muy dulce, le gustaba el sadomasoquismo, el señor casado con el que andaba ya le había dado el anillo a su hija, ella no se oponía, su hija sufría maltrato, ella notaba mal a su hija muy cambiada pero no le dijo nada pues su hija es adulta, el señor casado la controlaba y hasta que nivel que su hija dice que el no tiene nada que ver, el chofer le iba a hacer daño a sus nietos, el señor casado era guapo, su hija es inocente.
Luego el abogado en entrevista, que el chofer tuvo la culpa, el fue el asesino, y Origel pregunta «¿El chofer que tenia que ver con este triángulo amoroso?, ¿Cuál fue el móvil?, el abogado estrella dice «Eso yo no se, yo solo se lo que ella me ha dicho».
Me queda claro que la señora no es una gran actriz, por eso sera que renta cuartos en una cuidad perdida y su hija se inicio en el negocio de los taxis que porque el señor casado le regalo uno, lo peor no es la mente en blanco, lo terrible es su falta de escrúpulos que seguro le heredo a su hijita.
Pero tal vez aun mas escalofriante es que la señora piensa que ella es una víctima, que los familiares de asesinados y asesinos son iguales, su mente no le sabe preguntar, «¿Por qué?».